¿Por qué adquirir un lavavajillas?
Dos buenas razones: es un valioso aliado para ganar tiempo y ahorrar energía. Ya no es un producto de lujo, sino realmente un aparato que facilita la vida diaria y que no consume demasiada agua ni energía.
Ventajas energéticas importantes
Desde el punto de vista energético: la mayoría de los aparatos cuentan hoy con un programa automático que permite regular el consumo de agua y energía para adaptarlo al grado de suciedad.
Además, con la opción de inicio diferido se pueden programar los ciclos en el momento en el que se quiere que se inicien. Un lavavajillas permite ahorrar hasta 90 L en comparación con el lavado manual de trastes y, en un año, puede ahorrarle hasta 70 h.
¿Integrable o de libre instalación?
Se puede colocar directamente o empotrarse en los muebles de la cocina. Si elige la segunda opción, tiene dos posibilidades. Con solo 38 dB, el volumen sonoro más bajo... En este último caso, los controles se encuentran en la parte superior de la puerta.
Aprecie su facilidad de uso
Para escoger un lavavajillas, uno de los criterios fundamentales es que los canastos se puedan ajustar. Lo cual supone colocar los canastos a distintas alturas, que cuenten con dientes plegables, cestas para vasos, etcétera. Gracias a esta flexibilidad, se pueden cargar más artículos (cubiertos para más de 15 personas) o bien artículos más voluminosos.
¿Cuáles son los lavavajillas más silenciosos?
Solo 38 dB, el volumen sonoro más bajo de un lavavajillas en programa nocturno. Ideal si su cocina es abierta o si hace funcionar el lavavajillas mientras duerme. ixina® incluye los modelos más silenciosos en la selección de lavavajillas que propone.